Viaje a Cuba para trabajar como asesor en el hotel Meliá Cayo Coco, un resort cinco estrellas, la primera toma de contacto fue un poco accidentada según contrato debería incorporarme cuando tuviese el permiso de trabajo pero no fue así por lo que los primeros días fueron un poco caos, de comenzar conociendo las instalaciones y personal, nada de nada, al día siguiente de llegar ya estábamos en lío, jornadas interminables, mañanas de pastelería y tardes de panadería, la jornada comienza con el desayuno, se sustenta a base de bollería y panadería por todo el buffet incluso en zona de caliente y frío, es Cuba dicen, siguiente trabajo el pedido se hace diariamente a las ocho se abre economato y comienza el reparto de pedidos, tenemos que ir a buscarlo por qué si esperas te dan las diez, una vez recibido el pedido comenzamos a elaborar bizcochos y flanes rápido por qué hay que enfriar y montar las marquesitas y tartas todo debe estar a las doce pues a y media abre el buffet, así que corre que te corre, tenemos que hacer elaboraciones sencillas y rápidas pues el tiempo es muy justo al igual que el personal, por lo menos conseguimos de esta manera hacer un buffet diferente cada día y diferenciarnos del caliente
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